Maduro: Una amenaza regional que debe ser neutralizada
Declaración de nuestra organización con respecto a las presuntas irregulares acciones militares tomadas por el régimen chavista en la frontera con Colombia y con Brasil el 22 de enero de 2025.
INTERNACIONALESNACIONALES
Consejo de Coordinación Nacional
1/22/20251 min read


Nicolás Maduro y su régimen representan un grave peligro para la estabilidad de América Latina y la seguridad del hemisferio. Sus acciones recientes, como la presunta incursión de tropas en territorio brasileño, la violación del espacio aéreo colombiano con aviones rusos y la presencia de Diosdado Cabello en la frontera colombo-venezolana, evidencian que no estamos frente a un gobierno legítimo, sino a un cartel criminal que secuestró al Estado venezolano.
Estos delincuentes, convertidos en promotores del terrorismo regional, han convertido a Venezuela en un santuario para el narcotráfico y las guerrillas, mientras intentan desestabilizar a los gobiernos democráticos vecinos. Maduro y Diosdado Cabello no representan los intereses de un pueblo soberano, sino los de una estructura delictiva que usa los recursos e instituciones venezolanas para financiar actividades ilícitas y consolidar alianzas peligrosas que amenazan la paz hemisférica.
Hacemos un llamado categórico a los gobiernos de Colombia y Brasil, así como a la comunidad internacional, a actuar de manera contundente. No estamos ante un conflicto entre Estados, sino ante una amenaza transnacional que exige una respuesta inmediata. En respaldo al libre ejercicio de la soberanía de los venezolanos, hoy suprimida por estos criminales, la región debe asumir su responsabilidad y combatir sin titubeos a quienes han convertido a Venezuela en un epicentro de desestabilización, narcotráfico y terrorismo.
La permanencia de Maduro y su régimen representa un riesgo existencial para la región. Cada día que siguen usurpando el poder, América Latina enfrenta una mayor expansión del narcotráfico, la consolidación de grupos armados ilegales y el debilitamiento de sus democracias.
Es hora de enfrentar esta amenaza con la firmeza que exige. Neutralizar al régimen de Maduro es más que un deber moral con el pueblo venezolano; es una necesidad estratégica para garantizar la seguridad y la paz de toda la región. El momento de actuar es ahora.